
Las plantas de procesado de carne que quieren estar en vanguardia, trabajan continuamente en la optimización de sus procesos de producción e integración de sus líneas de envasado en el proceso global, al objeto de garantizar que los productos son empaquetados de forma higiénica, fiable y rápida. Busch ha analizado cuáles son las opciones de suministro de vacío más adecuadas dependiendo del tamaño de la planta y las cantidades de producción implicadas, para lograr una mayor rentabilidad.
Como punto de partida, Busch señala que el envasado al vacío de productos cárnicos y embutidos ofrece una ventaja fundamental, que es el considerable aumento del tiempo de conservación, gracias a que la eliminación del aire en el envase reduce drásticamente el contenido de oxígeno y, con ello, se ralentiza la actividad de las bacterias que requieren oxígeno. Además, el envasado al vacío es higiénico y permite que los productos que se presenten de una manera atractiva. Existen máquinas de envasado adecuadas a cualquiera de los requisitos de envasado, pero todas tienen en común la necesidad de generar el vacío necesario en el envase, lo que se puede lograr mediante una bomba integrada o una bomba de vacío separada. Otras alternativas incluyen un sistemas de suministro de vacío centralizado a los que se conectan varias máquinas de envasado.
La bomba de vacío, ya sea integrada o configurada por separado a la máquina de envasado, es la forma más simple y común de generar el vacío para el envasado
Normalmente, la bomba de vacío está integrada o dispuesta por separado próxima a las máquinas de envasado al vacío, de la cámara de la máquina a la termoformadora. Tal como explican desde Busch, las bombas de vacío de paletas rotativas lubricadas con aceite se utilizan casi exclusivamente para este fin. Este tipo de bomba de vacío, desarrollada específicamente para la industria del envasado por el Dr.-Ing. K. Busch GmbH en la década de los 60, ha sido durante mucho tiempo un estándar en el envasado al vacío, y su desarrollo continuado asegura que son siempre tecnológicamente actuales.
En el caso de las termoformadoras de mayor escala con altos volúmenes de envasado, puede equiparse con una bomba de vacío Roots, cuya combinación con bombas de paletas, facilita que el tiempo de bombeo de vacío sea más corto, lo que se traduce en una mayor cantidad de productos envasados por unidad de tiempo. Si se opera con varias máquinas de termoformado, se debe considerar la centralización de vacío.
En un sistema parcialmente centralizado, se puede operar con dos y hasta un máximo de cinco máquinas de termoformado. Con la centralización parcial, las bombas de vacío rotativas de paletas se integran en un sistema central de prevacío para todas las máquinas de envasado en una habitación separada, con lo que se evita el peligro de emisiones de aerosoles. Las bombas de vacío Roots se instalan directamente en las máquinas de envasado y se conectan al sistema de generación de prevacío central con un sistema de tuberías, lo que asegura que las bombas Roots operen a su máxima eficiencia y permiten tiempos cortos durante el envasado.
Si se utilizan más de cinco máquinas de envasado, los costes de inversión son muy altos debido a la utilización de bombas Roots en todas las máquinas individuales, por lo que en este caso, Busch recomienda la centralización total del suministro de vacío. Por lo general, se supone que se requieren menos bombas de vacío para un suministro de vacío centralizado que para una puesta en marcha de las bombas individuales directamente al lado de las líneas de envasado. Si se pasa de un sistema descentralizado a uno centralizado, las bombas de vacío existentes pueden integrarse en el nuevo sistema centralizado, con una clara reducción de los costes de inversión. Por un lado, los costes de energía son sustancialmente inferiores al utilizar bombas de vacío Roots, y además, los requisitos de refrigeración para la climatización del recinto también se reducen puesto que todas las bombas de vacío se encuentran fuera de la sala de envasado.
La mayor higiene es otra de las ventajas de los sistemas centralizados. La eliminación de todos los generadores de vacío de la sala de producción elimina el peligro de contaminación de los alimentos a través de los aerosoles de aceite. Además, no hay necesidad de que los empleados entren en la sala de envasado higiénicamente sensible para el mantenimiento o reparación. Asimismo, presenta beneficios en cuanto al mantenimiento, ya que un sistema de suministro de vacío centralizado tiene un diseño modular, lo que significa que los módulos individuales pueden ser desconectados para su mantenimiento, en cuyo caso se activa automáticamente una unidad de reserva. Esto significa que el trabajo de mantenimiento puede llevarse a cabo durante el funcionamiento sin afectar la salida de producción de las máquinas de envasado.
excelente y muy claro