
Tras la reunión mantenida ayer con el Secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granados y con la Directora General de Trabajo Autónomo, María Antonia Pérez León, las asociaciones de autónomos UPTA (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) y ATA (Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos), han hecho público que se ha alcanzado un principio de acuerdo que establece nuevos derechos para este colectivo, más ventajosos de lo que el Gobierno planteaba inicialmente.
El acuerdo fijará un incremento del 1,25% en la base de cotización tanto para autónomos societarios como autónomos personas físicas, y un tipo aplicable de 30% el primer año; el 30,3% el segundo año; un 3,6% el tercero y el 30,90% en el cuarto año. Esto se traduce en que la cuota media anual de los autónomos subirá una media de 60 euros.
En contrapartida, se establecen nuevos derechos con coberturas en casos de accidente de trabajo; enfermedad profesional; cese de actividad; formación profesional y, sobre todo, la bonificación de la incapacidad temporal (IT) por contingencias comunes. Los acuerdos alcanzados contemplan, asimismo que se aplique el tipo sobre las contingencias señaladas, que será el 0,6% en contingencias profesionales; el 1% para el cese de actividad y el 0,1 % en formación. “Estas prestaciones harán posible que nuestro colectivo goce de una protección social similar a la que desde hace años disfrutan los trabajadores por cuenta ajena, rompiendo de esta manera la brecha existente entre ambos”, señalan desde UPTA.
Los acuerdos alcanzados contemplan que se aplique el tipo del 0,6% en contingencias profesionales, el 1% para el cese de actividad y el 0,1 % en formación
El presidente de esta organización, Eduardo Abad, ha calificado a través de sus redes sociales de "pequeñísima" esta subida de las cotizaciones y agradece la postura de la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, “por dotar a los autónomos con la mayor protección social de la historia”.
Por su parte, según ha hecho público por los mismos medios, Lorenzo Amor, presidente de ATA, este incremento del 1,25% “supone una subida inferior a la media de los últimos 15 años (1,4%)”, y recuerda que “el Gobierno nos planteaba en octubre una subida de 40 euros/mes en las cuotas para 2019. En su segunda propuesta nos planteaba una subida de 22 euros/mes”, y que finalmente “ayer ATA y UPTA acordamos con el Gobierno una subida de 5 euros/mes con más protección y mejores prestaciones”.
Según destacan desde UPTA, “otro asunto importante es el referido a la tarifa plana, que se asemejará a la cotización de los contratos de aprendizaje y formación en el régimen general, entendiendo que esta figura es la que más se aproxima a la de un emprendedor”.
También se contempla la creación de una comisión de trabajo para estudiar la modificación del actual cese de actividad. Según valoran desde esta organización, se tratará de “una comisión que pueda establecer un sistema menos dañino para los intereses de los solicitantes del mismo y que permita dar un sentido de máxima protección ante un ‘no deseado’ cierre del negocio”.
De cara a los temas a desarrollar en el primer trimestre de 2019, señalan como materia prioritaria el futuro sistema de cotización en función de ingresos.
Un colectivo integrado por cerca de dos millones de trabajadores
Este acuerdo significa un tema de gran calado social para nuestro país, ya que, según los últimos datos del INE, a 30 de septiembre de 2018 había 1.991.601 trabajadores autónomos personas físicas inscritos en los diferentes regímenes por cuenta propia de la Seguridad Social.
Por segmento de actividad la distribución de los autónomos está encabezada por los que trabajan en el sector servicios, que suponen el 73,1%; seguidos por los que realizan su actividad en la agricultura (11,5%); en la construcción (11%), y en la industria (4,4%).
Por lo que respecta a su perfil de edad, el 72,7% de los autónomos supera los 40 años. Cabe destacar que el 85,9% de los autónomos no supera la base mínima de cotización, porcentaje que asciende a más del 90% cuando la edad es inferior a los 40 años, en tanto que a partir de los 55 años, el 28,2% cotiza por una base superior a la mínima, hecho que se relaciona con la proximidad a la edad de jubilación.