
Las previsiones para el cierre de 2018 apuntan a un crecimiento en torno al 4%. Para el año siguiente se espera un leve descenso hasta el 3%, lo que situaría al mercado español en 535 millones de euros.
El 53% de los ingresos agregados del sector provienen de los mercados extranjeros
Según el estudio Sectores basic “Aditivos para la Industria Alimentaria” publicado recientemente por el Observatorio Sectorial DBK de Informa, algunas de las claves que explican este comportamiento de mercado son los lanzamientos de nuevos productos multifuncionales con mejores prestaciones y mayores beneficios para la salud, la percepción de un escenario económico positivo, el crecimiento del volumen de negocio en la industria de la alimentación o la tendencia al alza entre los consumidores de orientarse preferentemente hacia los productos naturales frente a los de origen artificial.
El estudio también señala que la tendencia de expansión de las principales empresas españolas se dirige hacia mercado extranjeros. De hecho, el 53% de los ingresos agregados de los veinte operadores principales especializados de 2016 se registraron de la facturación fuera de nuestras fronteras. A pesar de que la Unión Europea sigue ocupando el primer puesto en cuanto al destino de las exportaciones, los mercados emergentes de África, América Latina y Asia han tomado una presencia creciente.
En la actualidad, el sector de la fabricación o importación de aditivos y complementos para la industria alimentaria engloba a unas 150 empresas, en su mayoría de pequeño o mediano tamaño, aunque se aprecia asimismo que el número de compañías de gran dimensión tienden a integrarlas en sus grupos multinacionales.