
El aire comprimido juega un papel decisivo en los procesos alimentarios y las empresas del sector son cada vez más conscientes de su importancia, así como de la necesidad de asegurarse de que no sea una posible fuente de contaminación cuando tiene contacto con el producto. En este escenario, Beko Technologies se evidencia como un aliado de los fabricantes en el mantenimiento de la seguridad alimentaria, mediante el desarrollo de soluciones adaptadas a las necesidades de cada empresa y de cada proceso productivo.
Un ejemplo de ello ha sido el protagonizado por el fabricante de charcutería selecta y platos gourmet precocinados, Charcutería y Cocinados, S.A., Cuit's, una empresa de talante pionero, que destaca en su investigación constante de nuevos procesos productivos. La compañía desarrolló nuevos métodos de fabricación en los que el aire comprimido entra en contacto con el producto y, de acuerdo con su política de aseguramiento de la calidad y mejora continua querían asegurarse de que este fuera de la máxima calidad exigible.
Para cumplir con este objetivo, un especialista de Beko Technologies realizó una visita técnica a las instalaciones de Cuit's, tras la que se determinó la ampliación del tratamiento para alcanzar la calidad deseada, cumpliendo al mismo tiempo con "el requisito imprescindible de que fuera energéticamente eficiente", señalan desde Beko, que finalmente optó por la instalación de un secador de adsorción regulado mediante punto de rocío tras el secador frigorífico existente.
El secador de adsorción logra un punto de rocío mejor que -40° C (Calidad clase 2, según ISO 8573). El sensor de punto de rocío incorporado permite conocer y asegurar en todo momento el grado de secado del aire, pues aparece en pantalla y si la calidad bajara se activaría una alarma en el panel. De este modo, "en Cuit’s están tranquilos, saben que el aire puede ser utilizado en contacto con el producto para sus innovadores procesos de fabricación", afirman fuentes de Beko Technologies.
Además, el ciclo de regeneración del secador de adsorción está regulado por los valores detectados por el sensor de punto de rocío. Este sistema permite un ahorro de más de 782 m3/h al día, lo que equivale a más de 3.000 euros al año.
Tras la mejora de la instalación se realizó una auditoría de calidad del aire comprimido que reflejó un grado 1 :2 :1 según la ISO 8573. Una valoración "excelente", subrayan en Beko, a lo que añaden que "ahora, gracias a la implementación de sistemas eficientes y controlados Cuit’s tiene la seguridad de que sus alimentos están siendo procesados con la higiene y seguridad alimentaria que sus clientes merecen".