
El ejemplo de adaptación a las exigentes necesidades del productor líder del sector en Austria, Recheis Teigwaren, ha puesto de manifiesto la versatilidad y adaptabilidad de la tecnología de pesado multicabezal de Ishida en el empaquetado de cualquier variedad de pasta, un producto que destaca por su fragilidad, por lo que requiere un manejo delicado.
Recheis fabrica una amplia gama de referencias de pasta, de diferentes formas y tamaños, que representan distintos desafíos en el pesado, caso de las espirales, debido a su tendencia de entrelazarse; las hörnchen, una especialidad austríaca cuyos tubos curvados fluyen rápido y fácilmente, o los penne y farfalle, variedades particularmente delicadas que requieren un manejo cuidadoso para mantener la calidad.
Para el envasado de toda su gama, Recheis cuenta con pesadoras multicabezales de Ishida en sus ocho líneas de empaquetado altamente automatizadas, que pueden programarse rápidamente para manejar virtualmente cualquiera de estos tipos de pasta, independientemente de su tamaño, forma o fragilidad.
Para dar el tratamiento idóneo a cada referencia, el sistema vibratorio de la pesadora se ajusta automáticamente, adecuándose a las características de flujo de la pasta que se maneja. El revestimiento especial de las tolvas y la disposición de los embudos de descarga fijos en un ángulo pequeño, aseguran el mínimo de posibles roturas de las variedades más delicadas, al tiempo que se reduce el ruido de fábrica.
Las pesadoras multicabezales de Ishida destacan por su versatilidad al permitir trabajar con artículos de características de diferentes tamaños, formas y grado de fragilidad, permitiendo además un rápido cambio de producto
Una característica que aumentan aún más la versatilidad y agilidad de las líneas de envasado, es que dos de las ocho multicabezales Ishida son pesadoras de 16 cabezales que funcionan como dos máquinas de ocho cabezales separadas, cada pareja acoplada a su propia embolsadora. Ambas mitades de las pesadoras trabajan independientemente, de modo que cuando se tiene que cambiar el film para una embolsadora, la otra puede seguir trabajando.
Además, las dos máquinas de 16 cabezales están equipadas con un conjunto adicional de tolvas de memoria, por lo que cada sección de ocho cabezales trabaja efectivamente con 16 combinaciones de tolva, permitiendo seleccionar y combinar su peso óptimo para dos líneas de envasado independientes. Esta característica de diseño permite un alto nivel de precisión de pesaje.
Otro desafío al que Ishida ha dado respuesta es que los paquetes de la marca Recheis Goldmarke están dotados de cierre tipo clip, y para que las máquinas de embalaje puedan posicionar correctamente estos cierres, la velocidad máxima de pesado es 50 por minuto, que las pesadoras Ishida podrían superar fácilmente y con la máxima precisión si es necesario.
Facilidad de uso y limpieza son otras de las destacables ventajas de los equipos de pesaje, ya que cada línea de envasado puede ser operada por una sola persona, controlando la pesadora multicabezal a través de su monitor de pantalla táctil a color, estableciendo unos parámetros que se traducen en unos rápidos y sencillos cambios de producto. Por su parte, la limpieza completa de cada pesadora se puede realizar en tan solo 30 minutos.