
Fundada en 1890, Mahou San Miguel es una compañía familiar 100% española, “líder del sector cervecero en nuestro país con una cuota de producción del 34%”, según destacan fuentes de la empresa, que dispone de ocho centros de elaboración de cerveza -siete en España y uno en India-, cuatro manantiales de agua con sus plantas de envasado y un equipo de más 3.200 profesionales. A lo largo de sus más de 128 años de historia, la empresa ha experimentado un crecimiento continuo favorecido por una acertada política de adquisiciones: en el año 2000, Mahou adquirió San Miguel; en 2004, incorporó la marca canaria Reina; en 2007, Cervezas Alhambra, y en 2011 compró Solán de Cabras, lo que le permitió diversificar su negocio.
En la actualidad, según los datos de la empresa, produce más del 70% de la cerveza española que se consume en el mundo y está presente en más de 70 países, siendo sus principales mercados Reino Unido, Guinea Ecuatorial, Italia, Alemania, Portugal, India y los Países Nórdicos. En 2017, sus ventas alcanzaron los 1.262,2 millones de euros y registró una producción de 15,6 millones de hectolitros, de los que 13,8 millones corresponden a cerveza y 2,8 millones a agua y refrescos.
270 millones de euros invertidos en diez años
A lo largo de su trayectoria, la empresa ha mostrado una vocación de mejora continua de sus productos y procesos, lo que en los últimos diez años se ha traducido en una inversión de 270 millones de euros para dotar de las tecnologías más innovadoras a sus centros de elaboración de cerveza, manantiales y plantas de envasado de agua mineral. El objetivo de este esfuerzo inversor ha sido “maximizar la eficiencia de las instalaciones y garantizar su óptimo comportamiento ambiental, y seguir siendo así referentes en el sector en innovación, sostenibilidad y excelencia industrial”, señalan desde la cervecera.
El Grupo Mahou San Miguel ha experimentado un crecimiento continuo favorecido por una acertada política de adquisiciones: en el año 2000, Mahou adquirió San Miguel; en 2004, incorporó la marca canaria Reina; en 2007, Cervezas Alhambra, y en 2011 compró Solán de Cabras
En concreto, durante 2017, la inversión ascendió a más de 30 millones de euros, de los que 28,2 millones se dirigieron a la implantación de mejoras en los centros de producción de cerveza ubicados en Alovera (Guadalajara), Lleida, Málaga, Burgos, Candelaria (Tenerife), Córdoba y Granada. Los cerca de 2 millones de euros restantes se destinaron a sus manantiales de agua mineral ubicados en Beteta, Cuenca (Solán de Cabras y Fuente del Arca), y al localizado en Los Villares (Jaén). En total, durante el pasado ejercicio, realizó 261 proyectos distintos de inversión en sus centros.
En palabras de su director Industrial, Nicolás Castrejón, “en Mahou San Miguel tenemos un compromiso continuo para garantizar que nuestras plantas sean un referente en materia de innovación, sostenibilidad y excelencia industrial, contribuyendo, además, al desarrollo económico y social de las comunidades en las que operamos”. Por este motivo, dotamos a nuestros centros de las mejores prestaciones en aseguramiento y mejora de la calidad y máxima flexibilidad y fiabilidad operativa, siempre sobre la base de un equipo de profesionales comprometido y lleno de talento, que contribuye con su trabajo diario a que continuemos siendo líderes en el sector”.
Compromiso sostenible
En su política inversora, Mahou San Miguel refleja un firme compromiso con los entornos en los que desarrolla su actividad desde un punto de vista medioambiental, económico y social. Algo que queda patente en el hecho de que, al tiempo que su producción ha aumentado un 58% desde el año 2000, la compañía ha reducido su consumo unitario de agua en un 41% gracias a la constante optimización de equipos y procesos.
Nicolás Castrejón, director Industrial: “en Mahou San Miguel tenemos un compromiso continuo para garantizar que nuestras plantas sean un referente en materia de innovación, sostenibilidad y excelencia industrial, contribuyendo, además, al desarrollo económico y social de las comunidades en las que operamos”
Esta eficiencia se traslada también al rendimiento energético de Mahou San Miguel, que ha logrado reducir su consumo unitario en un 50%. Además, el 100% de la energía eléctrica consumida en los centros de producción y sedes españolas de la cervecera ya procede de fuentes renovables. Por otro lado, sus emisiones de CO2 han experimentado un descenso del 52% en el mismo periodo y asegura haber conseguido ya tener residuo cero en todos sus centros.
Además, como parte de su RSC, el pasado año el grupo destinó 28 millones de euros para apoyar la moda, el arte, la cultura, la música y el deporte. Iniciativas a las que se suma la puesta en marcha del Marco Estratégico de Sostenibilidad ‘Somos 2020’, un plan a tres años con el que la cervecera quiere “ser un referente activo en esta materia en el sector de gran consumo” y al que se destinarán más de 30 millones de euros.