
“Se están definiendo estándares cada vez más altos en cuanto a la conformidad de los productos y la detección de contaminantes a fin de garantizar la protección de sus marcas y consumidores”, asegura Mike Pipe de la división de inspección de productos de la compañía. Para dar solución a ello, Mettler Toledo ha desarrollado un sistema de inspección de rayos X, Safeline X39. El nuevo equipo se ha diseñado para aplicaciones de alimentos congelados y garantiza la realización de diez comprobaciones a 1.800 piezas por minuto.
La velocidad es un aspecto esencial para aquellos fabricantes que necesitan garantizar la calidad de las hamburguesas congeladas, ya que no pueden estar más de ocho minutos en un congelador con de aire sin sufrir degradación. Es, por lo tanto, necesario que la tecnología de inspección de productos usada en el proceso de fabricación sea rápida, eficiente y no provoque interrupciones innecesarias que puedan generar tiempos de inactividad en la línea de producción. El sistema X39 se ha desarrollado específicamente para cumplir estas necesidades, permitiendo, además, reducir los desperdicios, la necesidad de repetir trabajo y los tiempos de inactividad, lo que genera ahorros en los resultados finales de los fabricantes de alimentos.
Doble comprobación
El sistema de rayos X, X39, aplica un proceso de inspección en dos fases. La primera utiliza una tecnología con láser integrado que determina la conformidad con parámetros de productos previamente programados en cuanto a longitud, anchura y altura, además de comprobar cualquier defecto provocado por copos. Los productos que no cumplan los estándares se rechazarán, mientras que los productos aptos continuarán hacia la segunda comprobación de integridad.
El sistema X39 se ha diseñado para facilitar la limpieza y el mantenimiento con objeto de reducir el tiempo de inactividad
La segunda fase utiliza un detector de rayos X para inspeccionar los productos aptos restantes en busca de contaminantes como hueso calcificado, piedra mineral, cristal, metal y plástico de alta densidad, a la vez que se comprueba la existencia de agujeros, abolladuras, defectos en los bordes o cualquier otra anomalía en la masa o la forma.
Para lograr la máxima eficiencia operacional, el dispositivo X39 está equipado con software avanzado, por lo que es muy sencillo de utilizar y está diseñado para garantizar que la tecnología esté siempre optimizada. Los cambios de productos son muy rápidos porque se pueden almacenar menús que reducen la cantidad de errores humanos. El software supervisa todos los aspectos del sistema y genera advertencias previas sobre la exactitud del láser, las boquillas de rechazo y los sensores de confirmación de rechazo.
El sistema X39 se ha diseñado para facilitar la limpieza y el mantenimiento con objeto de reducir el tiempo de inactividad. Por ejemplo, las tareas como la sustitución de sensores individuales se pueden llevar a cabo sin interrumpir la producción. El diseño del sistema X39 sigue directrices reconocidas en la industria como las del European Hygienic Engineering and Design Group (EHEDG, Grupo Europeo de Ingeniería y Diseño Higiénico) y la National Sanitarios Foundation (NSF, Fundación Nacional de Sanidad) para cumplir los más altos estándares higiénicos.